MALDITOS, MALDITOS EDITORES

Aceptaría que me arrancaran las uñas una a una con un gancho al rojo vivo, preferiría incluso ser devorado entero por cerdos hambrientos y asquerosos, que me saquen los ojos y me pateen en las pelotas, cualquier cosa es mejor a lo que me han hecho los malditos editores de cierta "revista electrónica" para la que trabaja una amiga mía.

Amablemente ella me pidió que hiciera una reseña y una recomendación de dos libros distintos (los que quisiera) para ayudarle con su revistilla, ya que el que antes lo hacía había renunciado días antes.

Me ofreció total libertad creativa y elegir los libros que yo quisiera. Tres o cuatro días me tomó el decidirme por un par de libros que no fueran muy convencionales pero tampoco muy escandalosos, al quinto día hice la reseña de "El Viejo y la Mar" de Hemingway y al sexto hice la recomendación de uno de mis libros favoritos "El Guardián Entre el Centeno" de J. Sallinger. Al séptimo u octavo día envié por correo ambos escritos.

Esta mañana entré a la página para checar la revista, en la sección de literatura estaba mi reseña del viejo y la mar, pero no aparecía mi nombre por ningún lado. Vale, no hice esto por el crédito y ver mi nombre en la página-pensé y no me ofendí demasiado; pero el colmo fué cuando vi mi recomendación hecha pedazos, algún imbécil en la edición le pareció correcto mover los párrafos de su lugar en incluso omitar varias líneas de mi hermoso escrito, el pobrecillo se convirtió en un montón de letras idiotas y sin sentido, como una mañana llena de diazepam.

Me siento ultrajado y me sentiría estafado si se me hubiera ofrecido dinero por el trabajo, pero lo hice yo por el placer que siento al exponer mi punto de vista sobre algunas obras maestras de la literatura universal; esto es lo que lo hace peor: que mutilen tu obra quizás por unas migajas es de por sí algo denigrante, que destruyan tu trabajo que amablemente hiciste como favor, éso es intolerable.

Maldigo a los editores pero a la vez pienso que quizás no sea culpa de ellos, sólo hacen su trabajo; son las editoriales las verdaderas chupasangre.No dejo de pensar que si esto me lo hizo una revistucha de poca monta, imagina la manera en que te comerán y escupirán las grandes editoriales nacionales y transnacionales.

No puedo permitir que esto continue sucediendo con lo que escribo, y con lo que escriben otros que no entran en los estándares habituales del escritor latinoamericano (como el cursi de Paulo Coelho); es por eso que he decidido hacer mi propia editorial, para publicar lo que escribo yo y lo que escribes tú, si tú, escritor frustrado que lee este blog; si caminas por las calles mirando belleza en la suciedad de perro, si escribes poemas en una servilleta de bar, si por las noches te retuerces en tu cama sin poder dormir, queriendo vomitar un montón de letras que hablan de esa angustia, desesperación o dolor, si le compusiste un poema a tu novia y te gustó tanto que quieres que el mundo lo vea; si te viste reflejado en una o más de las situaciones planteadas anteriormente, pues méte tu arte en un montón de blancas y sucias hojas de papel y mándalo a mi mail o contáctame o, mejor aún, HAZ TU PROPIA EDITORIAL, PUBLICA TUS PROPIAS COSAS.

D.I.Y(Do It Yourself) así le llaman los angloparlantes a esta cultura de hacerlo tú mismo, me parece que es hora de que empecemos a publicar todo lo que se nos ha prohibido hasta ahora por aquellas compañías que se enriquecen con el arte de terceros.