jueves, abril 19, 2007

Tuve un hermoso sueño en el que moría.

Bajaba yo unas escaleras muy anchas de mármol, creo que eran las de la Public Library de NY, era un hermoso día despejado de los que nunca me tocó ver durante mi estancia en aquella ciudad. A media escalera me detuve y voltee a mi derecha (probablemente para ver el edificio Chrysler) y fué entonces cuando sentí el frío y filoso golpe en mi nuca, nunca vi el arma con la que me golpearon, pero estoy casi seguro que fué un hacha.

Con la mano izquierda sentí la sangre bajando por mi cuello y de inmediato me fuí al suelo. Por un segundo pude verme a mi mismo tirado ahí con el charco rojo cubriendo rapidamente las hermosas escaleras blancas. Después veía el cielo azul y sentía la humedad de mi propia sangre en mi espalda, ahí tirado mirando un cielo con una que otra tímida nube y las ramas de un árbol desnudo me sentía en total paz. De repente se acercó una chica, sólo podía ver su silueta mientras me decía: Jorge, estás en estado de shock, trata de no desmayarte...

Lo siguiente que veía era las nubes danzando junto con las ramas de árbol que ahora estaba lleno de hojas y flores de los más variados colores, el cielo también cambiaba de color súbitamente, a veces ámbar, a veces violeta, a veces todos los colores y formas, mostrándome la gracia divina del morir y mientras veía todos los fractales y colores del mundo conocido y desconocido. También escuchaba el perfecto sonido del silencio zumbar dentro de mis oídos, el sagrado Om (como le llaman los hindúes) abarcaba todo lo que había dentro y fuera de mí, ni siquiera había un dentro ni un fuera, todo era uno mismo, un único ciclo de placer y perfección visual y auditiva.Luego volvió la silueta de la chica que ahora me decía: Jorge, estás alucinando, no te vayas, quédate con nosotros, no te rindas!! Pero todo era tan hermoso y etéreo que sólo pude responderle: perdón, es demasiado bello...Cerré los ojos y cuando los abrí, estaba en mi cuarto tumbado en mi cama, me levanté tan rápido que me caí de la cama, en el piso vi una enorme mancha carmesí, me llevé la mano a la cabeza y sentí la delgada y larga agujero que dividía diagonalmente mi hueso occipital.

Luego volví a abrir los ojos y estaba en mi cama tumbado en la misma posición, contesté el teléfono (que fué lo que me despertó) y era Thalía para presumirme un concierto al que ella sí asistió, me puse a pensar y la silueta y la voz de chica que vi y oí en mi sueño, cuadraban perfectamente con su fisionomía y tono de voz.

7 comentarios:

Miguel Ángel Ángeles dijo...

andale amigo...yo soñe que me salian cisnes de la boca... y hasta fui al dentista...

saludos... y abrazo...

gracias por la visita

Marcos Legaspi dijo...

creepy.

y soñe que un aviosn se estrellaba como en una piscina gigante y que provocaba una ola enorme que inundaba a parte de la ciudad.

El Mismísimo Solex dijo...

que loco!!!

creo que no se necesitan drogas para tener tan buenas experienciencias (talvez es el ácido que tenemos en la sangre)

talvez algun dia ese sueño se haga realidad

Oooooommm
Oooooommm

Kabrytta dijo...

Yo solo he soñado mi casi muerte una vez... y fue bastante aterrador sentir esa significativa aniquilación... y como me enseñaron pss me puse a revisar que onda con eso... mas nunca supe por qué y lo dejé por la paz...los sueños extraños se presentan cada noche, son mis pequeñas aventuras nocturnas (sniff por que no hay de otras)

Anónimo dijo...

ahora entiendo muchas cosas. lo que nunca me quedó claro fue porque diablos nunca me quisiste decir el sueño completo *zapes*

deja de ponerte nervioso, la dermatitis te está tragando y eso no es bueno.

que mandona soy, hasta en los sueños, jajaja... T_T

Mike dijo...

Los sueños se han vuelto tortura, mis muertos me visitan... los demonios se acercan... y sigo como dedo.

autZima dijo...

.... yo digo que que chido sueño, las nubes, el cielo, el sabor de la muerte, los colores!!!.... ella soñaba contigo también..