miércoles, junio 04, 2008

Blues de la Edición

-Tienes que escribir, escribe lo que sea, donde sea, pero hazlo, hazlo ya y hazlo mucho, todo el tiempo,
-De lo contrario?
-Pues tu dime, solo no quiero encontrarte otra vez ahí afuera de mi casa borracho y llorando, hablando solo de gente que te sigue...
-Perdón...
-Ps ni pedo, espantaste a la novial del "maese" pero de ahí no pasa.

La casa en Coyoacán era de dimensiones bizarras y estrepitosas, con muchas escaleras y pocos baños, demasiadas puertas y pocos cuartos, como salida de una pintura de Escher, o al menos así se veía en mi cabeza. Mi editor me regañaba sobre mi comportamiento la tarde anterior, "escribe escribe escribe", aún escucho su voz en mi cabeza con un tono de blues.

Lo que el no sabe es que escribo tanto que me duele la cabeza, escribo hasta quedarme dormido, o hasta volverme loco, pero después se muere todo, presiono ctrl+e+backspace y las letras del monitor desaparecen tras un destello azul. O si acaso plasmaba mis pensamientos sobre una hoja de papel, esta termina casi siempre en el cesto de basura.

He perdido la cuenta del numero de borradores que tengo guardados en este blog, los escribo con entusiasmo al principio y luego se marchitan, los guardo como borradores y pienso "pues luego a ver qué mas le pongo, esperaré a que vuelva la inspiración"-pero no vuelve, no ha vuelto en meses en algunos casos.

Sin embargo, mi editor tiene razón, debo escribir y escribir, al menos para mantenerme aquí, en este plano; los que salen perdiendo son ustedes estimados lectores, ya que ahora aparte de escribir, publicaré cada estupidez que salga de mi cabeza, al menos una vez al día, quizás más de una vez al día.

1 comentario:

Mike dijo...

Pues a escribir se ha dicho... escriba, escriba, escriba, escribano, que en sus letras lleva la penitencia y la salvación de sus pecados (Aunque diga no buscar la absolución)